Leana Consuelo Carbonell Alvarado, una ciudadana colombiana de 46 años, falleció el pasado miércoles 2 de octubre mientras se encontraba en el Aeropuerto Internacional Hato en Curazao. La mujer, que había partido de Colombia con destino a Polonia, debía hacer escalas en Curazao y los Países Bajos como parte de su viaje.
Sin embargo, al llegar a Varsovia, las autoridades polacas la deportaron, argumentando que no presentó un tiquete de regreso a su país ni comprobó tener fondos suficientes para su estadía, según informó la Cancillería colombiana.
Al ser devuelta a Curazao, Carbonell Alvarado fue retenida en el Departamento de Justicia del aeropuerto, un lugar donde generalmente se alojan personas que intentan ingresar irregularmente a la isla. No obstante, en su caso, se trataba de una deportación desde Europa, y no de un intento de ingreso ilegal.
Mientras permanecía en este lugar, Carbonell comenzó a sentirse mal y solicitó asistencia médica. Lamentablemente, aunque fue atendida, ya era demasiado tarde para salvarle la vida. Testigos afirman que la connacional no recibió la atención médica oportuna cuando mostró los primeros síntomas de enfermedad, lo que pudo haber sido crucial para evitar su muerte.
El caso ha generado gran preocupación entre sus familiares, quienes esperan respuestas claras sobre las circunstancias que rodearon su fallecimiento y la actuación de las autoridades aeroportuarias. Las investigaciones continúan para esclarecer si existió negligencia en su atención médica.