El banco de inversión estadounidense JP Morgan alertó este lunes sobre el riesgo fiscal que enfrenta Colombia, señalando que el Gobierno de Gustavo Petro ha subestimado el recaudo de impuestos para 2024, lo que podría extenderse a los años siguientes. En su informe sobre las perspectivas macroeconómicas de la región, JP Morgan subrayó que esta situación pone en riesgo las metas fiscales del país en el mediano y largo plazo, especialmente en un contexto donde la regla fiscal continúa siendo un desafío para el Tesoro Nacional.
El informe destaca que el bajo desempeño del recaudo fiscal, que cayó un 14,2% en el tercer trimestre del año, es el peor en más de una década. Esta caída ha generado preocupación, ya que podría obligar al gobierno a realizar recortes adicionales en el gasto para cumplir con los compromisos establecidos en la regla fiscal. JP Morgan señala que la capacidad de Colombia para consolidar sus finanzas está comprometida por los márgenes limitados de su consolidación fiscal, los cuales dependen de la aprobación del presupuesto para 2025, el cual, según la firma, podría implicar más ajustes.
Además, la firma mostró inquietudes sobre el impacto a largo plazo del proyecto de reforma al Sistema General de Participaciones, que podría aumentar el gasto fiscal global en el mediano plazo. Aunque el impacto de esta reforma se proyecta para un periodo largo de 12 años, JP Morgan advirtió que podría comprometer aún más la sostenibilidad fiscal del país, lo que recuerda a los obstáculos fiscales que frenaron reformas similares en la década de 1990.
Por otro lado, en un contexto de gasto inflexible, que incluye pagos de pensiones y el servicio de la deuda, el gobierno colombiano se enfrenta a dificultades para implementar políticas fiscales más flexibles. A esto se suma el desafío de cumplir con los compromisos internacionales y los acuerdos comerciales, que podrían influir en la proyección económica y fiscal del país.
La situación fiscal de Colombia sigue siendo un tema de preocupación para los analistas, que sugieren la necesidad de una reforma fiscal profunda que permita un manejo más eficiente de los recursos públicos y garantice la estabilidad económica a largo plazo.