Más de 18,000 estudiantes accedieron a la educación en comunidades apartadas, un hito en la implementación del acuerdo de paz y un paso fundamental para ofrecer oportunidades a personas en proceso de reincorporación y a comunidades rurales en el país.
Así lo informó el Ministerio de Educación, el cual indicó que, a través del proyecto 'Arando la Educación, financiado por la Embajada de Noruega en Colombia, ha garantizado oportunidades a 18.000 estudiantes, de los cuales más de un tercio se ha graduado del bachillerato y 9 de cada 10 han permanecido durante su proceso educativo.
La permanencia y continuidad de estudiantes en el proyecto significa que personas en proceso de reincorporación han decidido no retomar las armas y reafirmar su compromiso con la construcción de paz y que víctimas del conflicto –quienes comparten los mismos salones de clase con quienes están en proceso de reincorporación– acepten con hechos y trabajo conjunto que la reconciliación es posible.
Esta iniciativa, liderada por el ministerio e implementado por el Consejo Noruego para Refugiados y Fucepaz, ha permitido que decenas de miles de jóvenes y adultos en comunidades apartadas y rurales de 60 municipios en 15 departamentos, logren acceder a espacios gratuitos de aprendizaje.
“Antes me daba vergüenza cuando iba a firmar y no podía, pero ahora ya puedo firmar mi nombre", dijo Celina, mujer de 72 años que ingresó por primera vez a un aula de clase gracias a esta iniciativa.
'Arando la Educación' llegó a zonas comunitarias y rurales del país, donde el Estado estaba ausente. Comunidades desatendidas durante décadas en los municipios de Mutatá (Antioquia), Tallambí (Nariño) o Purificación (Tolima), entre otras, ahora reconocen la labor del Estado, incluyendo a la sociedad civil y el esfuerzo de la comunidad internacional.
El acceso a una educación de calidad para menores de edad en áreas apartadas del país también tiene retos. En zonas rurales, 4 de cada 10 niñas y niños no van a la escuela primaria o secundaria. Por esta razón, este proyecto también restauró escuelas que hace más de 15 años no brindaban servicios educativos como consecuencia de la violencia. Cientos de niñas y de niños, adultos y jóvenes pudieron retomar su educación gracias a este proyecto, incluso durante la pandemia.
El futuro de la Colombia rural y su estabilidad dependen en gran medida de un compromiso firme con la educación. Por esta razón, el ministerio continuará liderando esta iniciativa, no solo para potenciar los logros de 'Arando la Educación', sino también para superar los retos de acceso, calidad y permanencia educativa que siguen evidenciándose en los territorios apartados y rurales, asegurando de igual forma que la implementación del Acuerdo de Paz siembre semillas de esperanza y sueños realizables a través de la educación en el país.