El Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel confirmó la liberación y deportación de la activista originaria de Suecia, Greta Thunberg. Tras una redada en altamar realizada por las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF), un grupo de voluntarios de Freedom Flotilla fueron privados de su libertad en la noche del 9 de junio.
De acuerdo con la secretaria general de Amnistía Internacional, Agnès Callamard, la expedición de 12 tripulantes a bordo del barco Madleen llevaba ayuda humanitaria a los palestinos desplazados por los últimos ataques en Gaza. Bajo esta línea, la respuesta militar de la IDF es parte de una historia de más de 18 años de bloqueo humanitario y detenciones contra activistas, periodistas y otros voluntarios.
Comparado con detenciones anteriores, el Parlamento Europeo expresó su preocupación por el incidente tras la desaparición de Rima Hassan, representante judicial del parlamento. La vocera Delphine Colard informó que las autoridades europeas establecieron comunicación con Israel para garantizar la seguridad de la eurodiputada originaria de Francia.
A través del perfil oficial de X, Hassan etiquetó a una serie de líderes internacionales con motivo de la detención de Madleen cuando se encontraba camino a Gaza. Entre ellos, destacaron el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, reconocido por su respaldo a Palestina, mismo que le otorgó la condición de persona non grata en Israel.
Sin embargo, frente a las relaciones comerciales de Brasil e Israel, una serie de organizaciones exhortaron al presidente a suspender la venta de crudo al país gobernado por Benjamín Netanyahu. La detención y deportación de los activistas y funcionarios de la tripulación con ayuda humanitaria para Gaza incrementó las peticiones de esta ruptura de comercio.
En el caso de Greta Thunberg, la activista recibió el apoyo de Amnistía Internacional y organizaciones internacionales, las cuales alertaron sobre su desaparición el 9 de junio. En entrevista con agencias internacionales durante el actual proceso de deportación, señaló que su equipo estaba consciente de los riesgos de llevar ayuda humanitaria a Palestina.
La situación de ayuda humanitaria de los 12 voluntarios contrastó con otros episodios de detenciones cometidas por Israel gracias a factores políticos adicionales. Debido a la presencia de una representante del Parlamento Europeo y el impacto mediático de la carrera de Thunberg, la presión internacional evitó la desaparición de las figuras públicas tras su detención. Asimismo, la petición de terminar relaciones comerciales entre Brasil e Israel puso el foco de atención en las demandas de los activistas frente a Gaza.