La representante a la Cámara María Fernanda Carrascal expresó su desacuerdo con un nuevo proyecto de ley laboral impulsado por el Partido Liberal, que busca retomar algunos aspectos de la reforma laboral que no avanzó en el Congreso. La propuesta de los liberales busca reincorporar recargos del 100% por trabajo nocturno y establecer que la jornada nocturna comience a las 7:00 p.m., medidas que forman parte de la reforma laboral que fue archivada.
Este planteamiento se presenta como una alternativa para evitar los elevados costos de una consulta popular, que, según estimaciones preliminares, podría ascender a alrededor de 800 mil millones de pesos. Frente a esa cifra, el Partido Liberal argumenta que una reforma parcial por vía legislativa podría ser más económica, permitiendo recuperar algunos beneficios laborales sin recurrir a un proceso nacional de consulta.
No obstante, Carrascal, quien ha defendido la consulta popular como un mecanismo legítimo para que los ciudadanos se pronuncien sobre las reformas, criticó duramente la propuesta del liberalismo. Aseguró que el Partido Liberal está tratando de apropiarse de propuestas que no impulsaron previamente en los debates legislativos, y acusó a los liberales de practicar "populismo y cinismo".
La congresista destacó que durante años los trabajadores han dejado de recibir los recargos por trabajo nocturno, lo que representó una pérdida de 1.8 billones de pesos anuales en sus ingresos. Además, subrayó la importancia de las demás disposiciones de la reforma laboral, señalando que el Partido Liberal parece tener miedo de la consulta popular.
Carrascal también calificó la presentación del nuevo proyecto como "irrespetuosa", debido a que se hace sin tener en cuenta el debate profundo ni el contexto político que ha rodeado la reforma laboral desde su inicio. La iniciativa del Partido Liberal no impide que otras bancadas presenten proyectos similares para reavivar partes de la reforma laboral que fue rechazada.
La consulta popular que apoya el Gobierno sigue siendo evaluada, mientras el debate sobre la reforma laboral continúa siendo un tema divisivo en el Congreso. Las propuestas y posiciones a favor y en contra siguen evolucionando, y el futuro de la reforma sigue abierto.