Misión de Colombia ante la ONU destaca el papel histórico de Colombia en el Consejo de Seguridad

La representante permanente de Colombia ante Naciones Unidas, Leonor Zalabata, aseguró que la elección de Colombia como miembro no permanente del Consejo de Seguridad para el bienio 2026-2027 coincide con un momento crucial para la reforma del sistema multilateral. La embajadora subrayó que en ese periodo se tomarán decisiones que marcarán el rumbo futuro de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).

“En 2026, estando Colombia en el Consejo de Seguridad, van a pasar cosas grandes”, afirmó Zalabata, al referirse a la agenda de transformación institucional que se discutirá en el marco del AG-80, el aniversario número 80 de la fundación de la ONU. Entre los cambios esperados se encuentra la elección de un nuevo secretario o secretaria general de la organización. De acuerdo con la embajadora, existe consenso entre muchos Estados miembros sobre la necesidad de que esta vez sea una mujer, preferiblemente originaria de América Latina o el Caribe.

Además, se llevará a cabo la elección de cinco jueces de la Corte Internacional de Justicia, el principal órgano judicial de la ONU. Para Colombia, participar en estas decisiones desde una posición activa en el Consejo de Seguridad representa un hecho histórico, que demuestra la relevancia diplomática del país en el escenario internacional.

“Todas estas cosas pasarán estando Colombia en el Consejo”, reiteró Zalabata, destacando el rol que asumirá el país en procesos determinantes para la arquitectura del derecho internacional, el fortalecimiento del multilateralismo y la garantía de la paz global.

La Misión de Colombia ante las Naciones Unidas, que Zalabata encabeza desde 2022, ha señalado que este nuevo rol reafirma la política exterior del Gobierno del Cambio: ética, propositiva y orientada al diálogo multilateral. La elección de Colombia con 180 votos en la Asamblea General es reflejo de una diplomacia activa y de una agenda internacional alineada con la transformación de las instituciones globales.

Colombia regresa por octava vez al Consejo de Seguridad como miembro no permanente, consolidando su compromiso con la resolución pacífica de los conflictos, el respeto por el derecho internacional y la promoción de un nuevo orden global más equitativo y representativo.