El territorio colombiano registró una jornada sísmica activa durante el lunes 13 de mayo de 2025, según el Boletín Sísmico emitido por el Servicio Geológico Colombiano (SGC). En total, se reportaron al menos 35 movimientos telúricos, la mayoría de ellos con magnitudes inferiores a 3.5 y profundidades que oscilaron entre superficiales (menores a 30 km) y medias.
El evento más destacado ocurrió a las 14:52 hora local en el municipio de Paipa, Boyacá, con una magnitud de 3.6 y una profundidad de 115 km. Aunque fue percibido por algunos habitantes del área, no se reportaron afectaciones. También se registraron sismos menores en regiones como Los Santos (Santander), Mutatá (Antioquia) y La Llanada (Nariño), zonas conocidas por su actividad geológica frecuente.
La actividad sísmica del país responde a su ubicación en la zona de convergencia de las placas tectónicas Nazca, Caribe y Sudamericana, lo que convierte a Colombia en un territorio altamente sísmico. Según el SGC, este comportamiento es normal dentro del contexto geodinámico nacional y no representa una señal inminente de eventos de mayor magnitud.
Las autoridades reiteraron la importancia de fortalecer la cultura de la prevención y la resiliencia ante los sismos. Se recomienda a la población tener a la mano un kit de emergencia, identificar zonas seguras en los hogares y lugares de trabajo, y participar en los simulacros de evacuación organizados por las alcaldías y organismos de socorro.
En respuesta a esta actividad, el Servicio Geológico Colombiano mantiene activo su monitoreo sísmico en tiempo real, y ha intensificado sus campañas de educación y preparación en comunidades vulnerables, especialmente en departamentos como Nariño, Cauca, Santander y Tolima, donde históricamente se han registrado sismos destructivos.
Expertos consultados por medios nacionales insisten en la necesidad de actualizar y fortalecer los sistemas de alerta temprana, así como en capacitar a los equipos de primera respuesta. "La preparación sigue siendo la mejor herramienta para reducir el riesgo. Aunque muchos de los sismos no se sienten, cada uno es una oportunidad para evaluar y mejorar los protocolos de emergencia", indicó el geólogo Camilo Vargas, asesor del SGC.