El exsenador y exdirector del Departamento de Prosperidad Social, Gustavo Bolívar, anunció oficialmente su aspiración a la presidencia de Colombia para las elecciones de 2026. Este anuncio se produce a pesar de no contar con el respaldo del presidente Gustavo Petro, a quien Bolívar expresó públicamente su admiración.
Durante un evento público, Petro mostró su desacuerdo con las aspiraciones políticas de Bolívar, sugiriendo que quienes renuncian con fines electorales deben alejarse del Gobierno inmediatamente. Bolívar, quien continuará en funciones hasta el 16 de mayo, defendió su compromiso con el proyecto político del progresismo, aunque manifestó su deseo de dialogar con Petro antes de su partida.
Conocido por su exitosa carrera como libretista y su posterior incursión en la política con Colombia Humana, Bolívar enfrenta ahora el reto de consolidar su candidatura dentro del Pacto Histórico. Su anterior fracaso en las elecciones a la Alcaldía de Bogotá y la falta de apoyo explícito del presidente pesan contra su postulación.
Otros nombres como María José Pizarro o Roy Barreras suenan con fuerza en la coalición oficialista. Pese a los desafíos, Bolívar insiste en su disposición a contribuir al proyecto progresista, incluso si no es el candidato elegido.
La decisión de Bolívar, evidencia las tensiones internas dentro del Pacto Histórico y planteando interrogantes sobre el futuro del movimiento progresista en el país.