El presidente de Colombia, Gustavo Petro, generó controversia tras ordenar la exhibición de la bandera del Movimiento 19 de Abril (M-19) durante un acto público en homenaje al expresidente uruguayo José Mujica. En su intervención, Petro señaló que el M-19 es parte fundamental de la historia política del país, subrayando su papel en la proclamación de la Constitución de 1991. “Esa generación derogó la Constitución de 1986, proclamó la del 91 y hoy es parte del Gobierno de Colombia”, expresó el mandatario.
Petro defendió el gesto como una reivindicación de las luchas sociales del pasado, enfatizando que muchos exmiembros del M-19 participaron activamente en la construcción democrática del país tras la firma de los acuerdos de paz de 1990. Además, recordó la figura de Carlos Pizarro, líder del movimiento asesinado en 1990 mientras era candidato presidencial.
La decisión de mostrar la bandera ha sido criticada por opositores, quienes consideran que exalta una etapa de violencia y división en el país. Algunos sectores señalaron que actos como este son un “irrespeto hacia las víctimas de la guerrilla” y afectan los esfuerzos de reconciliación.
Este no es el primer evento donde Petro emplea símbolos históricos para destacar su pasado político. Durante su toma de posesión en 2022, ordenó exhibir la espada de Simón Bolívar, robada por el M-19 en 1974 y luego devuelta como gesto de paz.
Mientras unos interpretan el gesto como una apropiación del pasado para fomentar el debate histórico, otros lo ven como un intento de glorificar un movimiento que dejó profundas cicatrices en el país. La controversia continúa alimentando el debate sobre cómo debe manejarse el legado del M-19 en la memoria colectiva de Colombia.