El Fondo Nacional de Prestaciones Sociales del Magisterio (Fomag) continúa en el centro de la controversia por la presunta deficiencia en la prestación de servicios de salud a los docentes del país. Recientemente, diversos reclamos han salido a la luz, principalmente en redes sociales, donde los usuarios exponen casos alarmantes de demoras y negligencia en la atención sanitaria. Estas críticas se intensifican a medida que se suman denuncias de situaciones extremas, algunas de las cuales han terminado en tragedias, como el fallecimiento de una persona debido a la falta de atención oportuna.
Uno de los casos más impactantes fue el de Sandra, quien compartió a través de un video su experiencia dolorosa tras la muerte de su esposo, un docente, a quien no se le brindó el apoyo necesario en tiempos críticos. En su testimonio, Sandra relató cómo su esposo falleció mientras esperaba la llegada de enfermeras, pañales y una silla de ruedas para recibir atención básica. "Murió esperando que llegara una enfermera", expresó la mujer, quien no pudo evitar denunciar la lentitud y la falta de recursos.
Asimismo, otra denuncia destaca el maltrato recibido por una madre al intentar agendar una cita pediátrica para su hija. Según su relato, un funcionario le indicó que la responsabilidad recaía en el Fomag, y le sugirió que se dirigiera directamente a esta entidad para ser redireccionada a otro prestador de servicios. La frustración de los docentes y sus familias se hace más evidente a medida que se conocen estos testimonios.
En medio de este caos, la congresista Jennifer Pedraza se sumó a las críticas y exigió una respuesta inmediata del gobierno. A través de un mensaje directo al presidente Gustavo Petro y al ministro de Salud, Guillermo Jaramillo, Pedraza expresó su preocupación por lo que calificó como una "interrupción de la prestación del servicio", asegurando que el nuevo modelo de salud del Fomag está fallando y que la improvisación está afectando gravemente a los maestros.
Las críticas al Fomag y la gestión de los servicios de salud continúan creciendo, y el gobierno enfrenta presiones para tomar medidas correctivas ante la creciente ola de denuncias.