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El reciente paro minero y campesino en los departamentos de Santander, Norte de Santander, Boyacá, el Bajo Cauca Antioqueño y el municipio de Marmato, Caldas, concluyó tras la firma de acuerdos que aseguran avances en temas críticos para estas comunidades.
Los compromisos alcanzados abarcan la formalización minera, control de la maquinaria amarilla y la delimitación de páramos, además de reconocer a las comunidades campesinas y a los pequeños mineros.
Gustavo Guerrero, delegado para Asuntos Ambientales y Minero Energéticos, detalló que los acuerdos buscan mejorar la situación de los mineros y campesinos, quienes han reclamado su derecho a una vida digna y al reconocimiento de sus actividades.
La intervención del ministerio público, a través de diversos delegados territoriales, facilitó la negociación y la defensa de los derechos de todos los involucrados.
La Procuraduría General confirmó que continuará monitoreando el cumplimiento de los acuerdos y los aspectos pendientes, como la posible declaración de reservas naturales bajo el decreto 044, que sigue en revisión.