Ichinono, el pueblo japonés donde las marionetas llenan el vacío de una comunidad envejecida

Colombia sábado 26 de octubre de 2024 - 13:52

A unos 60 kilómetros de Osaka, en el occidente de Japón, se encuentra Ichinono, un pequeño pueblo donde las marionetas han sustituido a los residentes que alguna vez llenaron sus calles y parques. La crisis de natalidad ha sido tan profunda que en las últimas dos décadas solo ha nacido un niño, quien, a menudo, pasea en triciclo por las solitarias calles del lugar. La mayoría de los habitantes restantes, en su mayoría mayores de 65 años, enfrentan la realidad de un pueblo que lentamente se queda vacío.

Ichiro Sawayama, jefe municipal de 74 años, se muestra preocupado por el futuro de Ichinono, al advertir que el camino actual del pueblo parece llevar a su extinción. La migración de jóvenes, que decidieron estudiar y trabajar fuera del lugar, es la principal razón de esta crisis demográfica que golpea a varios pueblos rurales de Japón.

Para combatir la sensación de abandono, los vecinos han llenado los espacios públicos con figuras de marionetas que simulan la presencia de niños y adultos. En los parques, estas figuras ocupan los juegos infantiles, mientras que otras parecen observar desde los bancos. “Probablemente las marionetas ya nos superan en número”, comenta Hisayo Yamazaki, una viuda de 88 años y una de las últimas residentes de la localidad. Otro habitante comentó que los jóvenes dejaron Ichinono al percibirlo como un lugar remoto, sin oportunidades para establecer una vida familiar.

La historia de este pueblo, como tantas otras en Japón, evidencia el desafío que enfrenta el país en términos de natalidad y la dificultad para atraer a los jóvenes de vuelta a las zonas rurales. En Ichinono, las marionetas son un símbolo de resistencia contra el olvido, aunque el futuro de sus calles y parques sigue en incertidumbre.