Durante una sesión de la Comisión Sexta del Congreso, la representante a la Cámara Susana Gómez, conocida como Susana Boreal, del Pacto Histórico, desató una intensa polémica con sus declaraciones sobre el sistema educativo colombiano. Boreal afirmó que forzar a los niños a asistir al colegio “es una forma de violencia y adoctrinamiento”.
“Yo siento que obligar a un niño a asistir al colegio es obligar su tiempo en un lugar donde muchas veces no quiere estar. Esto no garantiza que reciba educación de calidad”, manifestó la congresista, al tiempo que criticó duramente el modelo educativo del país, calificándolo de “mandado a recoger”.
Según Boreal, los problemas de fondo en el sistema educativo no se solucionan simplemente con la obligatoriedad de la asistencia escolar. Señaló que, en muchos casos, las escuelas no son espacios seguros ni propicios para el aprendizaje, haciendo referencia a situaciones como el bullying y la falta de condiciones adecuadas.
“Metemos a 40 o 50 niños en un salón con un profesor que no tiene garantías, y lo único que hacemos es prepararlos para una explotación laboral futura. Ni siquiera les estamos enseñando cosas útiles para sus vidas”, expresó, cuestionando la desconexión entre la educación formal y las necesidades reales de los estudiantes.
La congresista también sugirió considerar la voluntad de los niños, mencionando casos en los que no quieren ir al colegio por motivos específicos, como incomodidad con el entorno o problemas sensoriales, lo que a su juicio debería ser motivo de reflexión.
Sus declaraciones provocaron una ola de reacciones. La senadora María Fernanda Cabal, del Centro Democrático, fue una de las primeras en pronunciarse y criticó duramente a Boreal. “Esta congresista hace ‘leyes’ que no defraudan a los petristas, que creen que estudiar y trabajar es opresión y violencia. Y luego pretenden legalizar el cannabis”, escribió Cabal en su cuenta de X, aludiendo al historial legislativo de Boreal.
Mientras algunos apoyan la idea de que el sistema educativo requiere una transformación profunda, otros consideran que las propuestas de la representante son poco prácticas e incluso desconectadas de la realidad.
El debate abrió una discusión más amplia sobre los retos del sistema educativo en Colombia, entre los que se encuentran la falta de infraestructura adecuada, los elevados índices de deserción escolar y los bajos salarios de los docentes. Para algunos legisladores, la educación obligatoria sigue siendo fundamental para garantizar igualdad de oportunidades, mientras otros insisten en que es necesaria una reforma que haga del sistema algo más inclusivo y funcional.
Boreal, por su parte, aseguró que su intención no es otra que abrir un espacio para el debate y la reflexión. Sin embargo, sus palabras continúan generando controversia tanto en el Congreso como en la opinión pública.