Las intensas lluvias que se registran desde el sábado 3 de mayo en los corregimientos de El Carmelo y Villagorgona, en el municipio de Candelaria, Valle del Cauca, han dejado a más de 1.200 familias afectadas por graves inundaciones que colapsaron vías, viviendas y zonas residenciales, como consecuencia de un sistema de alcantarillado obsoleto e insuficiente.
La emergencia obligó a numerosas familias a evacuar sus hogares, buscar refugios temporales y, en algunos casos, pasar la noche a la intemperie. Ante la ausencia de soluciones inmediatas, la comunidad bloqueó durante cerca de cuatro horas la doble calzada de la vía Cali–Candelaria, a la altura del sector de Cavasa, exigiendo atención urgente por parte de las autoridades locales y departamentales.
Tras establecerse un diálogo con los manifestantes, la administración municipal de Candelaria, en coordinación con el gobierno del Valle del Cauca, puso en marcha acciones para mitigar los efectos de la emergencia. Entre las medidas adoptadas se encuentra el uso de motobombas para drenar el agua estancada en calles y viviendas, así como la habilitación de un albergue temporal en la institución educativa José Antonio Galán, destinado a las familias cuyas viviendas resultaron más perjudicadas.
La alcaldesa de Candelaria, Géssica Vallejo, hizo un llamado urgente a la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) para que brinde acompañamiento técnico y logístico a la comunidad afectada. Asimismo, solicitó el apoyo del sector empresarial local, instándolos a colaborar con motobombas, maquinaria amarilla, operarios, combustible y alimentos.
La situación no solo afecta a Candelaria. Municipios como Cartago y Alcalá también enfrentan emergencias por cuenta de la fuerte ola invernal que impacta al Valle del Cauca, generando alertas por parte de organismos de socorro ante posibles nuevas emergencias en la región.