Un incendio de gran magnitud se registró en la tarde del 15 de octubre de 2024 en la capilla de la Universidad Católica, ubicada entre las localidades de Teusaquillo y Chapinero, en la Diagonal 46A con Carrera 15B. La emergencia generó una rápida movilización de los organismos de socorro y alarmó tanto a los habitantes del sector como a los estudiantes y trabajadores del campus.
Vecinos del área, al notar las llamas y una densa columna de humo, se comunicaron de inmediato con la línea de emergencias 123. Elementos del Cuerpo Oficial de Bomberos de Bogotá respondieron rápidamente, desplazando personal de las estaciones de Chapinero, Central y Ferias para contener la conflagración. Las labores incluyeron el control de los llamados "puntos calientes" para evitar rebrotes en la estructura.
Dada la magnitud de los hechos, se sumaron al operativo uniformados de la Policía Nacional y técnicos de empresas de servicios públicos como Codensa y Vanti. También intervinieron el Grupo Técnico de Investigación de Incendios y el Instituto Distrital de Gestión de Riesgos y Cambio Climático (Idiger), quienes iniciaron las investigaciones correspondientes para esclarecer las causas del siniestro.
Videos de la conflagración rápidamente se hicieron virales en redes sociales, particularmente en la plataforma X (anteriormente Twitter), donde se compartieron imágenes del humo y de la evacuación del lugar. La emergencia generó preocupación no solo entre los miembros de la comunidad educativa, sino también entre los residentes de la ciudad. Afortunadamente, se confirmó que no hubo heridos ni afectados por inhalación de humo, y las llamas fueron controladas poco después.
"De acuerdo al reporte que nos entrega el secretario, no tenemos ninguna persona afectada", declaró un vocero del cuerpo de bomberos, llevando tranquilidad a la ciudadanía tras la emergencia. Parte del techo de la capilla sufrió serios daños, como lo evidencian las imágenes divulgadas por los organismos de socorro.
Sobre las posibles causas del incendio, el mismo vocero detalló que los equipos de investigación ya trabajan para confirmar la versión preliminar. "Según los testimonios de las personas que estaban trabajando en la universidad, se utilizó un soplete para una intervención en la cubierta, lo que pudo haber generado el fuego", explicó el funcionario.
La capilla, un ícono religioso en Bogotá, quedó parcialmente destruida por las llamas. Las autoridades esperan que pronto se inicien los trabajos de restauración, dado su valor simbólico para la comunidad.