La canciller Laura Sarabia se encuentra en una posición crítica dentro del gobierno de Gustavo Petro debido a tensiones internas y cuestionamientos sobre su continuidad en el cargo.
A lo largo de su gestión, Sarabia ha enfrentado diversas controversias. Uno de los momentos más delicados fue el escándalo por el uso de un polígrafo a su exniñera, Marelbys Meza, hecho que derivó en su salida del gobierno en 2023. Posteriormente, fue reincorporada por el presidente, primero como directora del Departamento de Prosperidad Social y más tarde como canciller en enero de 2025.
La reciente designación de Armando Benedetti como ministro del Interior ha intensificado los conflictos en el gabinete. Sarabia y Benedetti han tenido una relación marcada por enfrentamientos y acusaciones. "Sarabia ha presentado denuncias ante la Fiscalía contra Benedetti por presunta violencia de género y enriquecimiento ilícito", mientras que él ha cuestionado su papel dentro del gobierno.
La situación ha generado molestias entre otros integrantes del gabinete. "La vicepresidenta Francia Márquez y la ministra de Ambiente, Susana Muhamad, han expresado su inconformidad con la situación", y se ha hablado incluso de posibles renuncias.
Aunque el presidente ha mostrado respaldo a Sarabia, la presión creciente y los desacuerdos internos ponen en duda su permanencia. El escenario político se mantiene en evolución y se prevén decisiones importantes en los próximos días que podrían reconfigurar al equipo de gobierno.