El Centro de Estándares de la Policía Nacional realiza el pilotaje de acompañamiento en campo, en un proceso de acompañamiento en cuatro a cuatro Estaciones de Policía (Fontibón, Bosa, Suba y Usaquén). Esta actividad contó con la participación de cuarenta uniformados, cuyo propósito fue poner en práctica los instrumentos y el procedimiento de acompañamiento de campo para verificar el cumplimiento de los nueve estándares mínimos profesionales, así como verificar si con los mismos se puede identificar acciones de mejora que fortalecen el servicio de policía.
Este ejercicio es fundamental para las actividades que el Centro de Estándares desarrollará durante el 2025 en todo el territorio nacional en el marco del modelo de servicio de policía orientado a las personas y en los territorios, pues permite asegurar la calidad y la coherencia de los procedimientos policiales en contacto directo con los uniformados y la ciudadanía, contribuyendo así a la construcción de confianza y legitimidad.
Se espera hacer retroalimentaciones derivados de este acompañamiento con insumos críticos para la definición y presentación del futuro procedimiento de acompañamiento y verificación de la aplicación de los estándares mínimos profesionales, además de proponer mejoras continuas en la prestación del servicio.
La actividad realizada fortalece la función de acompañamiento como una estrategia integral de evaluación y consolidación de competencias policiales y análisis para la mejora de los estándares mínimos profesionales.
Este proceso, al involucrar metodologías de observación y retroalimentación en campo, brinda una visión objetiva y cercana de las actuaciones de los uniformados en situaciones reales de servicio.
En segundo lugar, los instrumentos validados durante este acompañamiento permiten la aplicación sistemática de buenas prácticas y procedimientos de calidad, lo que se traduce en una mejora tangible en los lineamientos que se tiene que dar a los procesos formativos desarrollados por la Dirección de Educación Policial. Y por último, esta dinámica se proyecta positivamente en la percepción ciudadana, ratifica el compromiso de garantizar la profesionalización permanente de los uniformados y de velar por un servicio policial más profesional, cercano y efectivo.